Ingredientes
- 1 pechuga de pollo cocida y troceada
- 1 pellizco de nuez moscada molida
- 150 gramos de manteca
- 2 huevos
- 1 trozo de cebolla
- 2 vasos de leche (puede ser semidescremada)
Preparación
- Calentar la manteca en una sartén y sofreir la cebolla removiendo de vez en cuando durante 3 minutos a fuego medio bajo. Que no se dore demasiado.
- Condimentar con sal, pimienta y nuez moscada y seguir removiendo para dejar que se sofría durante 2 minutos más.
- Incorporar al sofrito 3 cucharadas de harina y mezclar. Este paso es muy importante para que se vaya integrando y la harina no tenga sabor a crudo. Seguir cocinando la masa de las croquetas de pollo a temperatura baja durante 2 minutos.
- Verter lentamente la leche mientras se revuelve para evitar que se formen grumos. Se puede agregar más leche a temperatura ambiente o tibia si es necesario. La consistencia debe ser similar a la de una papilla.
- Pasados unos 3 minutos y cuando la bechamel burbujee, agregar la pechuga de pollo y mezclar. Cuando esté bien integrado todo retirar la sartén del fuego y comprobar los condimentos.
- Dejar en un recipiente la masa de las croquetas tapado con un paño o papel film. Es recomendable dejar que se enfríe para que después al formar las croquetas queden enteras y no se deshagan al freírlas.
- Formar las croquetas con las manos y pasarlas por huevo batido y pan rallado.
- Fritar las croquetas por tandas en aceite bien caliente.
- ¡Y a disfrutar! Integrá el pollo a tu plato junto a alimentos sanos, naturales y variados. También es importante dormir bien para un descanso adecuado y realizar actividad física en forma periódica.